Capítulo 21
Sylvia POV
Cuando llegué a la puerta del despacho de Sarah ni siquiera llamé, abrí la puerta directamente y entré.
-¿Qué le has dicho a mis padres, Sarah?
Sarah, que estaba de espaldas a mí mirando por la ventana, se giró y dejó una taza encima de la mesa haciendo que un olor a té llegara hasta mi nariz.
-Sólo la verdad.
-¿De qué verdad hablas? ¿Qué es eso de que me voy una semana de vacaciones?
-Es lo mejor.
-¿Y quién ha decidido eso? ¿Tú? ¿O el padre de Peter?
Sarah me miró y no dijo nada.
-Tus padres pasarán a buscarte a primera hora mañana- Su voz sonó tal calmada que me crispó los nervios.
-No me voy a ningún lado, Sarah- Intenté vocalizar bien para que me entendiera bien.
Sarah apoyó ambas manos en la mesa y me miró un poco cansada.
-No es negociable, Sylvia.
-¿Por qué decidís por mí? ¿Por qué decidís por Peter y por mí?
-Porque sabemos lo que os conviene, si por nosotros fuera empezaríamos ahora mismo a desarrollar vuestros poderes uniéndolos con los de los demás, pero vuestro capricho inmaduro hace que no sea buena idea.
Me llevé las manos a la cabeza, harta.
-¡Estoy harta de oír esa estupidez, Sarah! ¡HARTA!
-No te sulfures, Sylvia- Sarah intentó calmarme.
Salí del despacho y di un portazo. Estaba muy cabreada y necesitaba despejarme. Oí el móvil vibrar en mi bolsillo, no miré quién era ni tampoco tenía intención de hacerlo. Sólo quería salir a un lugar donde nadie me encontrara y desahogarme. Llegué a un lugar oculto entre los árboles y alcé las manos con todas mis fuerzas en dirección a un árbol, liberando así la rabia que llevaba conteniendo todo el día. Una gran bola de fuego impactó contra la corteza del árbol y éste empezó a arder, pero no me alarmé, por primera vez en mucho tiempo me sentía fuerte y sabía lo que estaba haciendo. Alcé una de las manos y con un gesto hice que el fuego se extinguiera. Sonreí y respiré hondo. Me sentía libre, libre de toda furia y presión, y sabía cuál era la razón: Peter. El mero hecho de pensar que podrían separarnos o hacer que nos hiriéramos mutuamente hacía que quisiera luchar para demostrar que estaban equivocados… ¡Es que lo estaban! Entonces una imagen invadió mi cabeza, una imagen que había intentado olvidar desde hacía media hora más o menos: Neal. Para mi sorpresa no sentí rabia, sino una profunda decepción y pena, pena por Neal. ¿Qué clase de persona cae tan bajo por su propio egoísmo? ¿Qué clase de persona no acepta un no? Si Peter se enterara… Entonces sentí un nudo en el estómago. Peter no podía enterarse, si lo hacía… ¡Dios sabría lo que haría! No, no podía enterarse de ninguna manera.
*****************
Emma POV
Seguía en la sala recreativa con Jeremy y como seguíamos solos, lo estábamos aprovechando…Ya me entendéis.
-¿Sigues pensando en lo ocurrido con Neal?- Me preguntó Jeremy separándose de mí.
-No- Dije antes de volver a acercarlo a mí y besarlo. Y no mentía, Neal era un capullo y eso nadie podía negarlo, y no iba a permitir que ni él ni nadie me amargara ese fantástico beso de película que estaba compartiendo en ese momento con Jeremy.
-¡Emma!
Jeremy y yo nos separamos de golpe y miramos hacia la puerta, sonrojados.
-Ups…Lo siento- Mandy se encogió de hombros sonriendo.
-Mentira- La acusé entrecerrando los ojos.
-Créeme que no te interrumpiría si no fuera importante.
-Dispara.
-Hay problemas.
-¿Qué clase de problemas?- Fue Jeremy el que preguntó.
-Iba con Matt a hurtadillas para que nadie nos oyera por los pasillos, ya sabéis, queríamos ir a mi habitación y está prohibido…
-Sáltate esa parte, Mandy- La interrumpí.
-Sí, sí- Meneó la cabeza para aclararse la mente- La cuestión es que al pasar por la puerta del despacho de Sarah, oímos algo.
Dejó la frase en el aire.
-Esto parece una película de suspense, Mandy- Dijo Jeremy exasperado- Dinos ya qué pasó.
-De acuerdo, vale, bien- Mandy alzó las manos en señal de paz- Sarah estaba discutiendo con Sylvia.
-¿Qué?- ¿Con Sylvia?- Este mediodía la vi en el pasillo que da a la enfermería, parecía que estaba bien.
-Pues la bronca ha sido tremenda, más por parte de Sylvia que de Sarah.
-¿Qué se decían?- Preguntó Jeremy.
-Por lo visto, Sarah ha llamado a los padres de Sylvia para que la recojan mañana y se tome una semana de vacaciones.
-¡¿La están expulsando?!- Mi voz se elevó una octava.
-No- Mandy negó con la cabeza- Parece ser que Sarah no está de acuerdo con la idea de que Peter y Sylvia estén saliendo, por todo ese rollo del fuego y el hielo.
-Eso es una tontería…
-Ya, eso mismo dijo Sylvia, pero Sarah no iba a dar su brazo a torcer.
-¿Qué pasó luego?
Mandy se encogió de hombros.
-Matt y yo nos escondimos detrás del pilar del pasillo porque Sylvia salió como una bala y echando humo por las orejas- Miró a Jeremy y luego a mí- Metafóricamente.
-Hay que hablar con Sarah- Dije mientras me levantaba del sofá.
-No es buena idea, Emma- Jeremy me cogió del brazo, deteniéndome.
-¿Por qué no?
-Tu pichurrín tiene razón- Comentó Mandy- Lo mejor será que hablemos con Sylvia, creo que será mejor que haga lo que Sarah dice.
-¿Qué?
-Piénsalo, Emma- Mandy dio un paso hacia mí- ¿Qué ganamos poniéndonos en contra de Sarah? Nada. Ella es la que manda y nada la hará cambiar de opinión. Si Sylvia acepta esta semana de “vacaciones” puede que Sarah comprenda que no se trata solo de un capricho adolescente- Se encogió de hombros- Puede que comprenda que lo de Peter y Sylvia va en serio.
Me quedé mirándola embobada, ¿desde cuándo Mandy pensaba tanto?
-Mandy tiene razón, Em.
Me giré y miré a Jeremy mientras asentía.
-Entonces busquemos a Sylvia.
*****************
Habíamos buscado a Sylvia por todas partes durante media hora, hasta que finalmente la encontramos sentada en los escalones de la entrada. Tras encontrarla estuvimos hablando con ella durante unos quince minutos intentando hacerla entrar en razón (cosa que fue difícil). Ella seguía empeñada en que podía demostrarles a todos que si Peter y ella estaban juntos eran más fuertes, pero nosotros no lo veíamos así y no porque no lo creyéramos, sino por el mismo motivo que había dicho Mandy. Finalmente Sylvia logró entender nuestro punto de vista y aceptó la semana de “vacaciones”.
-Todo con tal de cerrar unas cuantas bocas- Había dicho.
*****************
Sylvia POV
Puse rumbo a la enfermería para hablar con Peter. A los chicos les había costado, pero al final me habían convencido de que lo mejor era aceptar lo que Sarah había mandado. Cuando entré en la habitación no encontró a Peter allí, ¿dónde estaría? ¿En su habitación? Sabía que no podía ir allí, al menos no después de que Vincent nos hubiera pillado y dado un ultimátum, y mucho menos ahora que ya no éramos sólo amigos. Saqué mi móvil y me salió una notificación en pantalla de una llamada perdida: Neal. Sería cabrón… ¡Encima se atrevía a llamarme! Abrí el what’s app y busqué el nombre de Peter.
-¿Dónde estás?
Su última conexión había sido la tarde anterior. Tuve que esperar cosa de dos minutos antes de recibir una contestación.
-En mi habitación, ya me encuentro mejor.
-¿Puedes bajar? Tenemos que hablar…
Un emoticono que mostraba auténtico pavor y terror apareció en la pantalla, seguido de este mensaje:
-¿Tenemos que hablar? No me gusta cómo suena eso…
Sonreí al leer ese mensaje.
-No te asustes, ¡y baja ya que es importante! Te espero en la cafetería en cinco minutos.
-De acuerdo, capitana Swan.
Reí ante ese mensaje, Peter era un caso…
Guardé el móvil en mi bolsillo y puse rumbo a la cafetería. Sabía que Peter no entendería el hecho de que aceptara lo que había dicho Sarah sin más, pero tenía que hacer que lo entendiera al igual que Mandy, Emma y Jeremy me habían hecho entenderlo a mí. Me senté en una silla y esperé…Y esperé… Y esperé… Unas manos me taparon los ojos por detrás. Pude saber quién era sin ni siquiera mirarlo.
-Has tardado seis minutos- Dije sonriendo.
Peter quitó las manos de mis ojos y me dio un beso en la cabeza antes de sentarse frente a mí.
-¿Qué ocurre?- Preguntó.
-A ver…- ¿Por dónde empezaba?- ¿Cómo te lo digo?
Peter alzó una ceja mientras esperaba a que me aclarara.
-Sarah ha llamado a mis padres.
Miré a Peter, que seguía mirándome a la espera de que continuara.
-Les ha dicho que pasaré una semana de vacaciones.
-¿Qué?
-Eso- Suspiré y me dejé escurrir en el asiento- La verdad de todo es que quieren alejarnos unos días para que se nos pase este “capricho” adolescente y nos centremos- Hice comillas con los dedos en “capricho”.
-Tú no vas a ningún lado- Dijo como si fuera la cosa más normal del mundo.
-Eso mismo dije yo, pero he hablado con Emma, Jeremy y Mandy y la verdad es que…
-La verdad es que nada, Sylvia.
Peter podía llegar a ser tan cabezota…
-Peter, es lo mejor.
Peter abrió la boca dispuesto a hablar pero yo seguí hablando:
-Si nos comportamos como adultos, Sarah y tu padre acabarán dándose cuenta de que están sobreactuando y de que la única manera de hacernos daños es separándonos.
Peter me miró sin decir nada, estaba reconsiderando la idea, lo sabía.
-Una semana no es nada- Me encogí de hombros- Podemos usar esos días para aprender a controlar mejor nuestro poder, además, hablaremos todos los días por what’s app.
Peter sonrió.
-Puede que tengas razón.
-Claro que sí- Sonreí.
Peter alargó la mano por encima de la mesa y agarró la mía.
-Ten mucho cuidado, Sysi- Esos preciosos ojos azules, que ahora bajo la luz del sol que entraba por la ventana adquirían un tono verdoso azulado, mostraban tristeza y preocupación.
-Tú también, Peter- Le apreté la mano y sentí que el corazón se me partía. Me levanté y me senté en el regazo de Peter mientras le rodeaba el cuello con ambos brazos- Te quiero.
-Yo te quiero más.
-Odio esta clase de juegos- Dije haciendo una mueca- Y lo sabes.
-Sí, sí, es muy ñoño y siempre te ha molestado las parejas que lo hacen- Sonrió- Pero por eso lo hago.
-Siempre te ha gustado picarme.
-Ya lo creo- Dijo antes de reírse.
-Señor Keller, espero que no aproveche mi ausencia para acercarse a otras jovencitas- Dije poniéndome muy seria.
-Eso jamás, señorita Swan- Peter también se puso muy serio y finalmente ambos tuvimos que echarnos a reír.
Peter se echó un poco hacia delante para besarme. Fue un beso tan dulce y tan tierno que sentí que el corazón de me encogía de ternura y cariño. ¿Cómo no podía haberme dado cuenta en estos últimos cinco años de que estaba enamorada de él?
-Te quiero- Me sorprendió escuchar que lo estaba diciendo en español.
Sonreí por esa muestra de cariño y apoyé mi frente en la suya. La siguiente semana sería muy larga…
Sylvia POV
Cuando llegué a la puerta del despacho de Sarah ni siquiera llamé, abrí la puerta directamente y entré.
-¿Qué le has dicho a mis padres, Sarah?
Sarah, que estaba de espaldas a mí mirando por la ventana, se giró y dejó una taza encima de la mesa haciendo que un olor a té llegara hasta mi nariz.
-Sólo la verdad.
-¿De qué verdad hablas? ¿Qué es eso de que me voy una semana de vacaciones?
-Es lo mejor.
-¿Y quién ha decidido eso? ¿Tú? ¿O el padre de Peter?
Sarah me miró y no dijo nada.
-Tus padres pasarán a buscarte a primera hora mañana- Su voz sonó tal calmada que me crispó los nervios.
-No me voy a ningún lado, Sarah- Intenté vocalizar bien para que me entendiera bien.
Sarah apoyó ambas manos en la mesa y me miró un poco cansada.
-No es negociable, Sylvia.
-¿Por qué decidís por mí? ¿Por qué decidís por Peter y por mí?
-Porque sabemos lo que os conviene, si por nosotros fuera empezaríamos ahora mismo a desarrollar vuestros poderes uniéndolos con los de los demás, pero vuestro capricho inmaduro hace que no sea buena idea.
Me llevé las manos a la cabeza, harta.
-¡Estoy harta de oír esa estupidez, Sarah! ¡HARTA!
-No te sulfures, Sylvia- Sarah intentó calmarme.
Salí del despacho y di un portazo. Estaba muy cabreada y necesitaba despejarme. Oí el móvil vibrar en mi bolsillo, no miré quién era ni tampoco tenía intención de hacerlo. Sólo quería salir a un lugar donde nadie me encontrara y desahogarme. Llegué a un lugar oculto entre los árboles y alcé las manos con todas mis fuerzas en dirección a un árbol, liberando así la rabia que llevaba conteniendo todo el día. Una gran bola de fuego impactó contra la corteza del árbol y éste empezó a arder, pero no me alarmé, por primera vez en mucho tiempo me sentía fuerte y sabía lo que estaba haciendo. Alcé una de las manos y con un gesto hice que el fuego se extinguiera. Sonreí y respiré hondo. Me sentía libre, libre de toda furia y presión, y sabía cuál era la razón: Peter. El mero hecho de pensar que podrían separarnos o hacer que nos hiriéramos mutuamente hacía que quisiera luchar para demostrar que estaban equivocados… ¡Es que lo estaban! Entonces una imagen invadió mi cabeza, una imagen que había intentado olvidar desde hacía media hora más o menos: Neal. Para mi sorpresa no sentí rabia, sino una profunda decepción y pena, pena por Neal. ¿Qué clase de persona cae tan bajo por su propio egoísmo? ¿Qué clase de persona no acepta un no? Si Peter se enterara… Entonces sentí un nudo en el estómago. Peter no podía enterarse, si lo hacía… ¡Dios sabría lo que haría! No, no podía enterarse de ninguna manera.
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Emma POV
Seguía en la sala recreativa con Jeremy y como seguíamos solos, lo estábamos aprovechando…Ya me entendéis.
-¿Sigues pensando en lo ocurrido con Neal?- Me preguntó Jeremy separándose de mí.
-No- Dije antes de volver a acercarlo a mí y besarlo. Y no mentía, Neal era un capullo y eso nadie podía negarlo, y no iba a permitir que ni él ni nadie me amargara ese fantástico beso de película que estaba compartiendo en ese momento con Jeremy.
-¡Emma!
Jeremy y yo nos separamos de golpe y miramos hacia la puerta, sonrojados.
-Ups…Lo siento- Mandy se encogió de hombros sonriendo.
-Mentira- La acusé entrecerrando los ojos.
-Créeme que no te interrumpiría si no fuera importante.
-Dispara.
-Hay problemas.
-¿Qué clase de problemas?- Fue Jeremy el que preguntó.
-Iba con Matt a hurtadillas para que nadie nos oyera por los pasillos, ya sabéis, queríamos ir a mi habitación y está prohibido…
-Sáltate esa parte, Mandy- La interrumpí.
-Sí, sí- Meneó la cabeza para aclararse la mente- La cuestión es que al pasar por la puerta del despacho de Sarah, oímos algo.
Dejó la frase en el aire.
-Esto parece una película de suspense, Mandy- Dijo Jeremy exasperado- Dinos ya qué pasó.
-De acuerdo, vale, bien- Mandy alzó las manos en señal de paz- Sarah estaba discutiendo con Sylvia.
-¿Qué?- ¿Con Sylvia?- Este mediodía la vi en el pasillo que da a la enfermería, parecía que estaba bien.
-Pues la bronca ha sido tremenda, más por parte de Sylvia que de Sarah.
-¿Qué se decían?- Preguntó Jeremy.
-Por lo visto, Sarah ha llamado a los padres de Sylvia para que la recojan mañana y se tome una semana de vacaciones.
-¡¿La están expulsando?!- Mi voz se elevó una octava.
-No- Mandy negó con la cabeza- Parece ser que Sarah no está de acuerdo con la idea de que Peter y Sylvia estén saliendo, por todo ese rollo del fuego y el hielo.
-Eso es una tontería…
-Ya, eso mismo dijo Sylvia, pero Sarah no iba a dar su brazo a torcer.
-¿Qué pasó luego?
Mandy se encogió de hombros.
-Matt y yo nos escondimos detrás del pilar del pasillo porque Sylvia salió como una bala y echando humo por las orejas- Miró a Jeremy y luego a mí- Metafóricamente.
-Hay que hablar con Sarah- Dije mientras me levantaba del sofá.
-No es buena idea, Emma- Jeremy me cogió del brazo, deteniéndome.
-¿Por qué no?
-Tu pichurrín tiene razón- Comentó Mandy- Lo mejor será que hablemos con Sylvia, creo que será mejor que haga lo que Sarah dice.
-¿Qué?
-Piénsalo, Emma- Mandy dio un paso hacia mí- ¿Qué ganamos poniéndonos en contra de Sarah? Nada. Ella es la que manda y nada la hará cambiar de opinión. Si Sylvia acepta esta semana de “vacaciones” puede que Sarah comprenda que no se trata solo de un capricho adolescente- Se encogió de hombros- Puede que comprenda que lo de Peter y Sylvia va en serio.
Me quedé mirándola embobada, ¿desde cuándo Mandy pensaba tanto?
-Mandy tiene razón, Em.
Me giré y miré a Jeremy mientras asentía.
-Entonces busquemos a Sylvia.
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Habíamos buscado a Sylvia por todas partes durante media hora, hasta que finalmente la encontramos sentada en los escalones de la entrada. Tras encontrarla estuvimos hablando con ella durante unos quince minutos intentando hacerla entrar en razón (cosa que fue difícil). Ella seguía empeñada en que podía demostrarles a todos que si Peter y ella estaban juntos eran más fuertes, pero nosotros no lo veíamos así y no porque no lo creyéramos, sino por el mismo motivo que había dicho Mandy. Finalmente Sylvia logró entender nuestro punto de vista y aceptó la semana de “vacaciones”.
-Todo con tal de cerrar unas cuantas bocas- Había dicho.
*****************
Sylvia POV
Puse rumbo a la enfermería para hablar con Peter. A los chicos les había costado, pero al final me habían convencido de que lo mejor era aceptar lo que Sarah había mandado. Cuando entré en la habitación no encontró a Peter allí, ¿dónde estaría? ¿En su habitación? Sabía que no podía ir allí, al menos no después de que Vincent nos hubiera pillado y dado un ultimátum, y mucho menos ahora que ya no éramos sólo amigos. Saqué mi móvil y me salió una notificación en pantalla de una llamada perdida: Neal. Sería cabrón… ¡Encima se atrevía a llamarme! Abrí el what’s app y busqué el nombre de Peter.
-¿Dónde estás?
Su última conexión había sido la tarde anterior. Tuve que esperar cosa de dos minutos antes de recibir una contestación.
-En mi habitación, ya me encuentro mejor.
-¿Puedes bajar? Tenemos que hablar…
Un emoticono que mostraba auténtico pavor y terror apareció en la pantalla, seguido de este mensaje:
-¿Tenemos que hablar? No me gusta cómo suena eso…
Sonreí al leer ese mensaje.
-No te asustes, ¡y baja ya que es importante! Te espero en la cafetería en cinco minutos.
-De acuerdo, capitana Swan.
Reí ante ese mensaje, Peter era un caso…
Guardé el móvil en mi bolsillo y puse rumbo a la cafetería. Sabía que Peter no entendería el hecho de que aceptara lo que había dicho Sarah sin más, pero tenía que hacer que lo entendiera al igual que Mandy, Emma y Jeremy me habían hecho entenderlo a mí. Me senté en una silla y esperé…Y esperé… Y esperé… Unas manos me taparon los ojos por detrás. Pude saber quién era sin ni siquiera mirarlo.
-Has tardado seis minutos- Dije sonriendo.
Peter quitó las manos de mis ojos y me dio un beso en la cabeza antes de sentarse frente a mí.
-¿Qué ocurre?- Preguntó.
-A ver…- ¿Por dónde empezaba?- ¿Cómo te lo digo?
Peter alzó una ceja mientras esperaba a que me aclarara.
-Sarah ha llamado a mis padres.
Miré a Peter, que seguía mirándome a la espera de que continuara.
-Les ha dicho que pasaré una semana de vacaciones.
-¿Qué?
-Eso- Suspiré y me dejé escurrir en el asiento- La verdad de todo es que quieren alejarnos unos días para que se nos pase este “capricho” adolescente y nos centremos- Hice comillas con los dedos en “capricho”.
-Tú no vas a ningún lado- Dijo como si fuera la cosa más normal del mundo.
-Eso mismo dije yo, pero he hablado con Emma, Jeremy y Mandy y la verdad es que…
-La verdad es que nada, Sylvia.
Peter podía llegar a ser tan cabezota…
-Peter, es lo mejor.
Peter abrió la boca dispuesto a hablar pero yo seguí hablando:
-Si nos comportamos como adultos, Sarah y tu padre acabarán dándose cuenta de que están sobreactuando y de que la única manera de hacernos daños es separándonos.
Peter me miró sin decir nada, estaba reconsiderando la idea, lo sabía.
-Una semana no es nada- Me encogí de hombros- Podemos usar esos días para aprender a controlar mejor nuestro poder, además, hablaremos todos los días por what’s app.
Peter sonrió.
-Puede que tengas razón.
-Claro que sí- Sonreí.
Peter alargó la mano por encima de la mesa y agarró la mía.
-Ten mucho cuidado, Sysi- Esos preciosos ojos azules, que ahora bajo la luz del sol que entraba por la ventana adquirían un tono verdoso azulado, mostraban tristeza y preocupación.
-Tú también, Peter- Le apreté la mano y sentí que el corazón se me partía. Me levanté y me senté en el regazo de Peter mientras le rodeaba el cuello con ambos brazos- Te quiero.
-Yo te quiero más.
-Odio esta clase de juegos- Dije haciendo una mueca- Y lo sabes.
-Sí, sí, es muy ñoño y siempre te ha molestado las parejas que lo hacen- Sonrió- Pero por eso lo hago.
-Siempre te ha gustado picarme.
-Ya lo creo- Dijo antes de reírse.
-Señor Keller, espero que no aproveche mi ausencia para acercarse a otras jovencitas- Dije poniéndome muy seria.
-Eso jamás, señorita Swan- Peter también se puso muy serio y finalmente ambos tuvimos que echarnos a reír.
Peter se echó un poco hacia delante para besarme. Fue un beso tan dulce y tan tierno que sentí que el corazón de me encogía de ternura y cariño. ¿Cómo no podía haberme dado cuenta en estos últimos cinco años de que estaba enamorada de él?
-Te quiero- Me sorprendió escuchar que lo estaba diciendo en español.
Sonreí por esa muestra de cariño y apoyé mi frente en la suya. La siguiente semana sería muy larga…