Capítulo 2
Seung Young POV
Miré a mi izquierda y vi que la princesa había sido la que había abierto la puerta.
-¿Quién es usted?- La princesa no gritó, cosa que me sorprendió.
Salí del armario rápidamente y me quedé mirándola. ¿Qué debía hacer? ¿Irme sin más? Llamaría a los guardias. ¿Amenazarla? Gritaría y vendrían los guardias.
-Tranquila…-Fue todo lo que pude decir.
-¿Tranquila?- La princesa se cruzó de brazos y miró mis manos- ¿Estaba robando? Deje todo lo que me ha quitado encima del tocador ahora mismo.
Me quedé mirándola, ¿qué hacía ahora? ¿Obedecía? ¿Y luego qué? ¿Cómo podía estar tan tranquila?
-¿Cómo puede estar tan tranquila?- No me di cuenta de que había formulado la pregunta en voz alta.
-¿Por qué no? ¿Acaso va a matarme? Entonces creo que será mejor que de la voz de alarma.
-¡No!- Me apresuré a decir.
La princesa sonrió. Me fijé un poco más en ella. Era realmente bajita…Aunque supongo que a mí todo el mundo me parecía bajo, considerando que yo era bastante alto. Tenía las mejillas sonrojadas y eso le daba un aspecto adorable, aunque en su penetrante mirada castaña había algo que me decía que esa persona adorable podía ser un león si se lo propusiera.
-¿Qué mira?- Me preguntó de golpe.
-¿Q…Qué?
La princesa se cruzó de brazos.
-Usted no es de aquí, ¿es chino?
-Coreano.
La princesa volvió a sonreír.
-Habla nuestro idioma bastante bien, ¿por qué?
-No tengo por qué contestar…
-¿Doy la voz de alarma?- Me interrumpió.
La miré sorprendido, era cierto que era la princesa pero… ¿Me estaba amenazando? ¿Una mujer?
-Llevo viviendo aquí cuatro años, he tenido que aprender la lengua de esta región- Contesté finalmente.
-Entiendo…-La princesa se quedó pensando un momento- Y usted es ladrón, ¿cierto?
-Es difícil encontrar un trabajo por aquí- Sonreí- Aunque qué sabrá usted, si siempre ha tenido todo lo que ha querido.
La princesa me miró sorprendida…Oh, no… ¿Daría ahora la voz de alarma? Nunca llegué a averiguarlo porque en ese instante la puerta se abrió de golpe y una figura masculina apareció en la puerta, sin duda era un guardia. La princesa y yo lo miramos sorprendidos y éste se quedó mirándome atónito, cuando miró mis manos y vio las cadenas de oro su semblante pasó del asombro a la ira.
-¡INTRUSO! ¡HAY UN INTRUSO EN PALACIO!
En cuestión de segundos la habitación se empezó a llenar de guardias, que traían como única intención matarme. Sin darme apenas cuenta de lo que iba a hacer, saqué el cuchillo que llevaba en el pantalón y tiré de la princesa hacia mí haciendo que mi cuchillo quedara al nivel de su garganta.
-¡No ataquéis!- Ordenó el que supuse que sería el general de palacio.
Noté que la princesa comenzaba a temblar entre mis brazos y aunque no podía verle la cara supe que estaba muy asustada. Su cabeza quedaba ahora al nivel de mis hombros y en cierta manera me sentí mal por amenazar a aquella chiquilla que no tenía nada que hacer contra mí.
-¡Retroceded!- Les grité a los guardias.
-¡Suelta la princesa ahora mismo, vándalo!- Me gritó el general.
Los guardias dieron un paso hacia mí y yo apreté más a la princesa y el cuchillo. Noté que ésta se tensaba más junto a mí.
-¡No deis un paso más!- Grité.
-¡Serás ejecutado por amenaza y hurto, desgraciado!- Gritó otro guardia.
Miré de reojo hacia atrás, la ventana por la que había entrado estaba a menos de un metro de mí y recordaba que abajo había una gran fuente…Era la única manera. Antes de darles tiempo a reaccionar, agarré a la princesa por la cintura y me arrojé por la ventana mientras ella gritaba horrorizada. Tardamos menos de cinco segundos en caer en la fuente provocando un gran estruendo.
-¡DETENÉDLO! ¡SE HA LLEVADO A LA PRINCESA!- Oí gritar al general cuando saqué la cabeza fuera del agua.
Miré a mi izquierda y vi que la princesa acababa de sacar su cabeza también.
-Vamos- La cogí del brazo y la saqué prácticamente a rastras de la fuente.
-¡¿Qué hace?!- Su voz sonó asustada- ¡Déjeme ir!- Tiró hacia atrás intentando soltarse.
Oí que los guardias salían de palacio dispuestos a apresarme, no había otra forma… Cogí a la princesa y me la eché al hombro mientras ésta gritaba y pataleaba intentando soltarse. Eché a correr lo más rápido que pude mientras oía los pasos de los guardias corriendo en nuestra dirección, pero yo confiaba en mi capacidad para correr…Escaparía.
Katherine POV
Hacía ya cuestión de una media hora que habíamos perdido a los guardias pero ese secuestrador seguía llevándome cargada en el hombro. ¿Por qué todo me tenía que pasar a mí? ¿Qué había hecho yo para merecer eso?
-Creo que aquí podemos parar- El secuestrador me soltó en el suelo de golpe y me tambaleé.
-Está loco… ¡Lléveme de vuelta a palacio!
-Lo siento, pero si hiciera eso perdería mi moneda de cambio.
-¿Su moneda de cambio?
-Si la entrego de nuevo, nada les impedirá matarme.
-¿Piensa hacer una especie de trueque?
-Puede llamarlo así…- Dijo antes de sentarse en la hierba del bosque y apoyarse contra un árbol.
Me quedé mirándolo con la boca abierta… ¿De verdad pensaba retenerme? Tampoco podía hacer ademán de huir, ¿qué conseguiría? Ese hombre me sacaba dos cabezas.
-Si está pensando en huir, borre esa idea de su mente- Me dijo de pronto.
-Este hombre…-Murmuré.
-Si su alteza no es demasiado exquisita podría sentarse en la hierba, necesitará estar descansada para la caminata que nos espera.
-¿Cómo dice?
El secuestrador me miró extrañado.
-¿Qué? ¿No esperaría que nos quedáramos aquí donde nos pueden encontrar de un momento a otro?
-¡Es un secuestrador!
El secuestrador se encogió de hombros.
-No sé por qué está tan enfadada- Dijo al cabo de un momento.
-¿Qué?
-Usted misma dijo que quería marcharse de ese lugar- Giró la cabeza y me miró- Y yo la he sacado de allí de cierta manera, ¿por qué está enfadada entonces?
Abrí la boca y la volví a cerrar…Había escuchado todo lo que había dicho.
-Pero esto es un secuestro- Dije finalmente.
-De acuerdo- El secuestrador suspiró- ¿Qué tal si lo hacemos de esta manera?
Lo miré confundida.
-¿Le importaría a su real alteza ayudarme a permanecer con vida y a cambio yo la mantendré fuera de su horrible vida llena de lujos por unos días?- Volvió a mirarme y sonrió.
Me quedé mirándolo un momento, pero no por lo que había dicho, sino porque sonriendo parecía una especie de príncipe asiático o algo así. Había estado tan cabreada que no me había fijado bien en él. Tenía el pelo negro suelto en una especie de melenita alborotada y la ropa que llevaba era claramente de una persona que se gana la vida como puede…
-¿Por qué no contesta a mi petición?
-¿Qué?- Mi voz apenas fue un susurro.
-Lo que le he preguntado…
-¡Oh!- Me aclaré la garganta- Visto de esa manera…-Lo pensé un momento- De acuerdo- Sonreí- Acepto el intercambio de favores.
El secuestrador volvió a sonreír. Suspiré y me senté a su lado mirando a la nada.
-¿Sabe cómo me llamo?- Pregunté al cabo de un momento.
El secuestrador me miró y frunció el entrecejo.
-No- Contestó finalmente- Nunca he estado muy puesto en los temas reales- Dicho esto volvió a girar la cabeza.
Me quedé mirándolo un momento hasta que finalmente volvió a mirarme.
-¿Qué?
Me señalé con el dedo.
-Katherine, Katherine Swan.
Él simplemente me miró un momento y luego volvió a mirar a la nada.
-Oye, secuestrador…-Volví a hablar.
-¿Y ahora qué?- Su voz sonaba cansada.
-¿No me va a decir su nombre?
-¿Por qué debería decírselo?
-Por educación y porque si vamos a pasar unos días juntos debería saber cómo llamarlo, ¿o prefiere que le diga “secuestrador”?
El secuestrador suspiró.
-Kim Seung Young.
-Wow…-Dije asombrada- Kim sería su apellido, ¿verdad?
-Así es.
-Entiendo… ¿Qué le parece si nos tuteamos? Sé que soy de la realeza y todo eso, pero no me va mucho seguir el protocolo.
-Me he dado cuenta- Dijo mientras sonreía de medio lado.
Me quedé pensando un momento mientras miraba al frente.
Seung Young POV
Katherine miró al frente con cara pensativa, ¿qué estaría planeando preguntar ahora? De pronto giró la cara de golpe hacia mí con una sonrisa pillina en la cara. Esa chica me hacía gracia, era una persona curiosa y con carácter, y era muy bonita, sobre todo cuando sonreía de esa manera tan pícara.
-¿Cuántos años tienes?- Me preguntó.
-¿Cómo?- Eso sí que me había pillado por sorpresa.
-Sin duda eres mayor que yo- Me miró pensativa- Si yo tengo dieciocho tú puedes tener… ¿Cuántos? ¿Unos 26? ¿27?
Sonreí y desvié la mirada. Sin duda era una chica particular.
-Eres un borde- Dijo de pronto.
-¿Cómo dices?
-Intento entablar un tema de conversación contigo y tú simplemente te limitas a contestar escuetamente.
-Descansa- Fue todo lo que dije- Cuando amanezca seguiremos con nuestro camino.
Katherine me miró un momento y resopló antes de tenderse dispuesta a dormir.
-Buenas noches- Dijo de pronto.
Seung Young POV
Miré a mi izquierda y vi que la princesa había sido la que había abierto la puerta.
-¿Quién es usted?- La princesa no gritó, cosa que me sorprendió.
Salí del armario rápidamente y me quedé mirándola. ¿Qué debía hacer? ¿Irme sin más? Llamaría a los guardias. ¿Amenazarla? Gritaría y vendrían los guardias.
-Tranquila…-Fue todo lo que pude decir.
-¿Tranquila?- La princesa se cruzó de brazos y miró mis manos- ¿Estaba robando? Deje todo lo que me ha quitado encima del tocador ahora mismo.
Me quedé mirándola, ¿qué hacía ahora? ¿Obedecía? ¿Y luego qué? ¿Cómo podía estar tan tranquila?
-¿Cómo puede estar tan tranquila?- No me di cuenta de que había formulado la pregunta en voz alta.
-¿Por qué no? ¿Acaso va a matarme? Entonces creo que será mejor que de la voz de alarma.
-¡No!- Me apresuré a decir.
La princesa sonrió. Me fijé un poco más en ella. Era realmente bajita…Aunque supongo que a mí todo el mundo me parecía bajo, considerando que yo era bastante alto. Tenía las mejillas sonrojadas y eso le daba un aspecto adorable, aunque en su penetrante mirada castaña había algo que me decía que esa persona adorable podía ser un león si se lo propusiera.
-¿Qué mira?- Me preguntó de golpe.
-¿Q…Qué?
La princesa se cruzó de brazos.
-Usted no es de aquí, ¿es chino?
-Coreano.
La princesa volvió a sonreír.
-Habla nuestro idioma bastante bien, ¿por qué?
-No tengo por qué contestar…
-¿Doy la voz de alarma?- Me interrumpió.
La miré sorprendido, era cierto que era la princesa pero… ¿Me estaba amenazando? ¿Una mujer?
-Llevo viviendo aquí cuatro años, he tenido que aprender la lengua de esta región- Contesté finalmente.
-Entiendo…-La princesa se quedó pensando un momento- Y usted es ladrón, ¿cierto?
-Es difícil encontrar un trabajo por aquí- Sonreí- Aunque qué sabrá usted, si siempre ha tenido todo lo que ha querido.
La princesa me miró sorprendida…Oh, no… ¿Daría ahora la voz de alarma? Nunca llegué a averiguarlo porque en ese instante la puerta se abrió de golpe y una figura masculina apareció en la puerta, sin duda era un guardia. La princesa y yo lo miramos sorprendidos y éste se quedó mirándome atónito, cuando miró mis manos y vio las cadenas de oro su semblante pasó del asombro a la ira.
-¡INTRUSO! ¡HAY UN INTRUSO EN PALACIO!
En cuestión de segundos la habitación se empezó a llenar de guardias, que traían como única intención matarme. Sin darme apenas cuenta de lo que iba a hacer, saqué el cuchillo que llevaba en el pantalón y tiré de la princesa hacia mí haciendo que mi cuchillo quedara al nivel de su garganta.
-¡No ataquéis!- Ordenó el que supuse que sería el general de palacio.
Noté que la princesa comenzaba a temblar entre mis brazos y aunque no podía verle la cara supe que estaba muy asustada. Su cabeza quedaba ahora al nivel de mis hombros y en cierta manera me sentí mal por amenazar a aquella chiquilla que no tenía nada que hacer contra mí.
-¡Retroceded!- Les grité a los guardias.
-¡Suelta la princesa ahora mismo, vándalo!- Me gritó el general.
Los guardias dieron un paso hacia mí y yo apreté más a la princesa y el cuchillo. Noté que ésta se tensaba más junto a mí.
-¡No deis un paso más!- Grité.
-¡Serás ejecutado por amenaza y hurto, desgraciado!- Gritó otro guardia.
Miré de reojo hacia atrás, la ventana por la que había entrado estaba a menos de un metro de mí y recordaba que abajo había una gran fuente…Era la única manera. Antes de darles tiempo a reaccionar, agarré a la princesa por la cintura y me arrojé por la ventana mientras ella gritaba horrorizada. Tardamos menos de cinco segundos en caer en la fuente provocando un gran estruendo.
-¡DETENÉDLO! ¡SE HA LLEVADO A LA PRINCESA!- Oí gritar al general cuando saqué la cabeza fuera del agua.
Miré a mi izquierda y vi que la princesa acababa de sacar su cabeza también.
-Vamos- La cogí del brazo y la saqué prácticamente a rastras de la fuente.
-¡¿Qué hace?!- Su voz sonó asustada- ¡Déjeme ir!- Tiró hacia atrás intentando soltarse.
Oí que los guardias salían de palacio dispuestos a apresarme, no había otra forma… Cogí a la princesa y me la eché al hombro mientras ésta gritaba y pataleaba intentando soltarse. Eché a correr lo más rápido que pude mientras oía los pasos de los guardias corriendo en nuestra dirección, pero yo confiaba en mi capacidad para correr…Escaparía.
Katherine POV
Hacía ya cuestión de una media hora que habíamos perdido a los guardias pero ese secuestrador seguía llevándome cargada en el hombro. ¿Por qué todo me tenía que pasar a mí? ¿Qué había hecho yo para merecer eso?
-Creo que aquí podemos parar- El secuestrador me soltó en el suelo de golpe y me tambaleé.
-Está loco… ¡Lléveme de vuelta a palacio!
-Lo siento, pero si hiciera eso perdería mi moneda de cambio.
-¿Su moneda de cambio?
-Si la entrego de nuevo, nada les impedirá matarme.
-¿Piensa hacer una especie de trueque?
-Puede llamarlo así…- Dijo antes de sentarse en la hierba del bosque y apoyarse contra un árbol.
Me quedé mirándolo con la boca abierta… ¿De verdad pensaba retenerme? Tampoco podía hacer ademán de huir, ¿qué conseguiría? Ese hombre me sacaba dos cabezas.
-Si está pensando en huir, borre esa idea de su mente- Me dijo de pronto.
-Este hombre…-Murmuré.
-Si su alteza no es demasiado exquisita podría sentarse en la hierba, necesitará estar descansada para la caminata que nos espera.
-¿Cómo dice?
El secuestrador me miró extrañado.
-¿Qué? ¿No esperaría que nos quedáramos aquí donde nos pueden encontrar de un momento a otro?
-¡Es un secuestrador!
El secuestrador se encogió de hombros.
-No sé por qué está tan enfadada- Dijo al cabo de un momento.
-¿Qué?
-Usted misma dijo que quería marcharse de ese lugar- Giró la cabeza y me miró- Y yo la he sacado de allí de cierta manera, ¿por qué está enfadada entonces?
Abrí la boca y la volví a cerrar…Había escuchado todo lo que había dicho.
-Pero esto es un secuestro- Dije finalmente.
-De acuerdo- El secuestrador suspiró- ¿Qué tal si lo hacemos de esta manera?
Lo miré confundida.
-¿Le importaría a su real alteza ayudarme a permanecer con vida y a cambio yo la mantendré fuera de su horrible vida llena de lujos por unos días?- Volvió a mirarme y sonrió.
Me quedé mirándolo un momento, pero no por lo que había dicho, sino porque sonriendo parecía una especie de príncipe asiático o algo así. Había estado tan cabreada que no me había fijado bien en él. Tenía el pelo negro suelto en una especie de melenita alborotada y la ropa que llevaba era claramente de una persona que se gana la vida como puede…
-¿Por qué no contesta a mi petición?
-¿Qué?- Mi voz apenas fue un susurro.
-Lo que le he preguntado…
-¡Oh!- Me aclaré la garganta- Visto de esa manera…-Lo pensé un momento- De acuerdo- Sonreí- Acepto el intercambio de favores.
El secuestrador volvió a sonreír. Suspiré y me senté a su lado mirando a la nada.
-¿Sabe cómo me llamo?- Pregunté al cabo de un momento.
El secuestrador me miró y frunció el entrecejo.
-No- Contestó finalmente- Nunca he estado muy puesto en los temas reales- Dicho esto volvió a girar la cabeza.
Me quedé mirándolo un momento hasta que finalmente volvió a mirarme.
-¿Qué?
Me señalé con el dedo.
-Katherine, Katherine Swan.
Él simplemente me miró un momento y luego volvió a mirar a la nada.
-Oye, secuestrador…-Volví a hablar.
-¿Y ahora qué?- Su voz sonaba cansada.
-¿No me va a decir su nombre?
-¿Por qué debería decírselo?
-Por educación y porque si vamos a pasar unos días juntos debería saber cómo llamarlo, ¿o prefiere que le diga “secuestrador”?
El secuestrador suspiró.
-Kim Seung Young.
-Wow…-Dije asombrada- Kim sería su apellido, ¿verdad?
-Así es.
-Entiendo… ¿Qué le parece si nos tuteamos? Sé que soy de la realeza y todo eso, pero no me va mucho seguir el protocolo.
-Me he dado cuenta- Dijo mientras sonreía de medio lado.
Me quedé pensando un momento mientras miraba al frente.
Seung Young POV
Katherine miró al frente con cara pensativa, ¿qué estaría planeando preguntar ahora? De pronto giró la cara de golpe hacia mí con una sonrisa pillina en la cara. Esa chica me hacía gracia, era una persona curiosa y con carácter, y era muy bonita, sobre todo cuando sonreía de esa manera tan pícara.
-¿Cuántos años tienes?- Me preguntó.
-¿Cómo?- Eso sí que me había pillado por sorpresa.
-Sin duda eres mayor que yo- Me miró pensativa- Si yo tengo dieciocho tú puedes tener… ¿Cuántos? ¿Unos 26? ¿27?
Sonreí y desvié la mirada. Sin duda era una chica particular.
-Eres un borde- Dijo de pronto.
-¿Cómo dices?
-Intento entablar un tema de conversación contigo y tú simplemente te limitas a contestar escuetamente.
-Descansa- Fue todo lo que dije- Cuando amanezca seguiremos con nuestro camino.
Katherine me miró un momento y resopló antes de tenderse dispuesta a dormir.
-Buenas noches- Dijo de pronto.